Scones de Queso

Hola! hoy traigo unos pancitos riquísimos salados con mucho sabor a queso.

Son muy fáciles de hacer y no llevan mucho tiempo.

Así que manos a la masa...

Ingredientes:

• 500 gr Harina de fuerza ( si tienes de repostería sirve también)

• 200 gr Queso ( Parmesano, cheddar, o un queso que te guste y sea sabroso)

• 150 gr Mantequilla bien fría

• Leche 100 ml ( usaremos lo que necesitemos)

• 2 Huevos

• Sal

• Hierbas opcionales ( Romero, Orégano, Tomillo)

PRECALENTAMOS EL HORNO A 200º.

PASO 1:

Para comenzar vamos a colocar la harina en un recipiente y le vamos a agregar él o los quesos que hayamos elegido. Vamos a rallarlos pequeño, teniendo en cuenta que no pueden ser pedazos muy grandes por que no se nos integraría en la masa.

Este paso lo hacemos con las manos.

PASO 2:

Ahora vamos a colocar la mantequilla que debe estar recién salida de la nevera bien fría cortada en cuadraditos y con la yema de los dedos, vamos a ir desmigándola junto con el queso y la harina. No tenemos que hacer una masa, sino un arenado.

PASO 3:

Como resultado deberíamos tener una cosa mas o menos así. La vamos a volcar en la mesada, y vamos a hacer un hueco en el medio, donde le agregaremos los huevos ligeramente batidos y la mitad de la leche. Vamos a ir amasando hasta que tengamos una masa que no se pegue a las manos. Si ves que está muy seca, agrega un poco mas de leche.

Si quisieras, ahora es el momento de agregar alguna especia para darle otro sabor.

PASO 4:

Una vez que tengamos la masa lista, la vamos a envolver con papel film y la vamos a llevar a la nevera por media hora como mínimo.

Pasado el tiempo, espolvoreamos la mesada con un poco de harina y con la ayuda de un palo de amasar la estiramos no muy fina, como de unos 2 cm.

Y ahora a cortarla! Yo en este caso lo hice con forma de triángulo. Pero puedes usar cualquier cortante que tengas. La forma que quieras darles.

Una vez que los tienes todos cortados, los colocamos en una bandeja para horno. Los llevamos al horno que teníamos calentando y lo bajamos a 180º.

Los horneamos a 180º por 20 minutos. Siempre teniendo en cuanta el tamaño del que los haz hecho, así que siempre estate atenta y cuando veas que se ponen doraditos míralos.

Cuando estén listos los sacamos y los dejamos enfriar.

Y listo!

Hasta la próxima!